viernes, 30 de enero de 2009

इदिओत wind





Menos mal que ya sé lo que es, y leí el libro "saber perder".Como dejarse llevar por el viento de la vida.
Volvió el viento, y yo, por una chorrada,ayer con el cd de Blood On The Tracks en la bolsa. (Me había dado por ahí , un “siroco” como otro cualquiera : es uno de los mejores discos. Dije )
Pero claro, un/a fanas como diox manda, se sabe una de cosas! ( verdaderas o falsas, qué más da). Podría haber elegido a Pat Garrett…pero me dio por el otro.
Bobadas. Podrían dar para un post largísimo , pero sería repetir, y además, ya sé que Duluth , y demás, lo conocen casi todos los marineros galegos , aunque no conozcan la música de Robert; y no pasa nada, y lo mío fue casualidad, azar o así.
El caso es que volvió el idiot wind; lo malo es que es literal, y Francia estaba en huelga, y hoy (teóricamente) llega un familiar de escala en París, y a ver que tal.
Ya puestos, casi prefería presenciar esa increíble historia del mismo disco: Lily, Rosemary And The Jack Of Hearts…eso sí q es lejano oeste, saloom incluido.
Esta noche el viento sopló mucho , y en la calle, de mañanita, volví a mojarme. Así que a casa, a hacer chapucillas, con la tele puesta con el tenis, zas, zas, y me resulta muy gracioso que dos españoles se enfrenten en las antípodas, pero aunque ayer, también me dieron unas pequeñas lecciones de tenis, yo lo tengo de ruido de fondo. Me resulta raro, raro, ver la tele por las mañanas. Qué gane el mejor ( es un decir, mi favorito es V., pero en parte es por esas cosas tan pueriles de: ya que el otro es un torete, pues que le gane el principito/principiante)

....



Y a pesar de eso, estoy escuchando a Apenino, una persona a la quiero mucho: es cercana…la fiesta termina a las 14 .15 h.

http://www.myspace.com/apenino

miércoles, 21 de enero de 2009

cafés




"No puedo imaginarme ni una hora de mi vida sin la riqueza de Europa, sin sus cafés, por ejemplo. Esos cafés que uno encuentra desde la costa atlántica -pienso en el de Pessoa en Lisboa, tan hermoso- hasta San Petersburgo, Odessa y Kiev. Moscú, en cambio, nunca tuvo cafés, pero Moscú es ya el principio de Asia, la inmensa Asia. Los cafés de este tipo tampoco existen en Estados Unidos ni en Inglaterra. Mantener ese diálogo de felicidad y de angustia, de ironía y trabajo, es algo para mí fundamental que, de forma milagrosa, ha sobrevivido a dos guerras mundiales y al Holocausto. Sin duda, habría que elaborar una metafísica del café..."
G. STEINER



Hoy he visitado todos los cafés que había visitado antes y me habían gustado, en diversos sitios; y la verdad es que fue una casualidad. Pensaba dar un paseo, antes de acudir a un lugar, una cita rutinaria y no muy agradable, pero comenzó a llover. Me metí allí, como podría meterme en otro lugar. El letrero ponía café, pero la carta del menú a la entrada , y algunas cosas me decían que era una de las tantas cafeterías de esta ciudad. Estaba casi vacío, éramos un señor en la barra y yo, que me senté en una mesa para hacer tiempo. Ah!, pero estaba la camarera. Sólo con verla al acercarse , y después al traer el café, me pareció una mujer inolvidable. Y el caso es que su apariencia era lo más normal, pero en algo era un soplo de naturalidad , y de bondad (en el buen sentido de la palabra). Yo pasaba las hojas del periódico, pero no me concentraba, en parte por lo repetitivo, en parte porque tal vez mi mente estuviese en otras cosas. Así que me llegaban ecos de la conversación con el viejo profesor (lo deduje por lo que hablaban , que si lo manuscrito, que si ¿y si usted no me entiende la letra?, y después porque él, al irse, me dijo que no le hiciese caso a los periódicos). Luego llegó un motero, se conocían. Después otro chaval que presupongo trabajaría por allí cerca. También se conocían (parecía que allí la única extranjera era yo). Comenzaron a hablar, o a coquetear, ni sé, pero sus forma de atenderlos, tan natural, me hizo cerrar ya el periódico, que al fin no leía. Todavía era pronto, pero me puse el chaquetón y me acerqué a la barra, a pagar. Con la misma naturalidad me cobró, me dijo algo, nos dijimos hasta luego y cuando yo salía, entraba más gente. Me fui con una sensación de alegría: a pesar de los pesares, aún hay gente que transmite esas cosas , tan sencillas : podría ser una ventera quijotesca.
No recuerdo el nombre del café- cafetería, pero no olvido el rostro de la chica , ni su manera de atender, con ese aire algo despistado pero amable, ni al viejo profesor. Espero no olvidad el lugar y volver pronto ; es que me gusta sentirme turista en mi ciudad, aunque sólo sea por un media hora o así. Y también espero que al rato de irme yo, aquello estuviese lleno, aunque ya no lloviese.

martes, 13 de enero de 2009

...



"Despedidas

Los huéspedes más alegres han
partido
desaparecieron las verdes
engalanaduras,
la luz sin sombra condona
la escarcha negra de los cristales.

Donde amantes y hierbas
gastaron sus semillas
en grietas de hierro
ahora el hielo hace las camas.

Pero no te complazcas en la pena,
ojo de ratón del petirrojo,
silencio reptante,
estas cautelosas líneas,

En sus circunloquios
son silenciosos testigos
del constante
usufructo del hombre" [ J. Berger]


no, aquí no ha nevado; estos días he visto la nieve a unos metros. Es igual, a mi no me pasa como al 1er párrafo de "cien años de soledad"...cuando al Buendía lo llevaron a conocer la nieve y Macondo era pueblo jóven: aún no había cementerio (ni idea de poque me acordé de eso ahora, hace mucho que no releo ese libro). Yo conozco la nieve, y me levantadome acordé por algún artículo suyo que me impactó: el mismo pintando en la franja de oriente medio, su certera descripción del entorno, tan precisa, tan de ojos abiertos, utilizando la tierra roja mezclada con H20 para pintar.
Son ráfagas de la memoria

mientras hay una mariposa de alegría revoloteando por mi tórax; lo noto en cada latido. Es una pequeñez, por fin O. vendrá en marzo.
El está feliz (que niños somos a veces, qué contagioso es el entusiasmo); mi madre , su madre, intenta moderarse, pero le brillan los ojos.

Mientras, yo paso las hojas del periódico, a veces leo algo, me duele, me siento impotente....y al final acabo pensando que al menos , O. llegará en buen momento: ya se habrá acabado el desquicie de la campaña electoral de las autonómicas.
Y espero que la T4 esté normal( todo lo tranquila que puede estar) Así de simples son mis deseos , pero aunque no vivo en esa casa, y me parece que me resultaría difil, me gusta la frase: alone but not lonely.
Y sigo un rato con un libro de poemas.Son el mejor antídoto al telediario y ciertas cosas. Dan calor , aunque aquí no haya nevado.

lunes, 5 de enero de 2009

pequeñअस कोसस cotidianas



la santa muerte
la santa muerte
"Sus fieles en su mayoría son considerados delincuentes de varios tipos, como narcotráficantes o asaltantes"

por supuesto, la foto la hizo mi sobrino Ale, in situ, en el D.F.
http://es.wikipedia.org/wiki/Santa_Muerte

la 1ª vez que estuve en méxico fué un noviembre , y me parecieron muy razonables las razones que daban para el depliegue de calaveras de pan de azucar...vamos, que todos los galenos de los cuidados paliativos se lo han copiado.
"Este culto ve a la muerte como algo innegable en la vida, una ley natural y que se tiene que aceptar. Se entiende a la muerte como un ser sufriente que se encarga de un trabajo penoso, que se le dio un gran poder pero una carga aún más grande. Recibe su poder de Dios, a quien obedece, al ser la muerte un elemento indispensable para la vida. Bajo esto se ve a la Santa Muerte más como un ángel que como cualquier otra cosa"

Alejandro anda alucinado (es lo que pasa por aislar a los niños en colegios bilingües)...y le hace fotos.

por mi parte ando a vueltas con la bofetada que, por fin, me dio una gitanilla poco lorquiana. Supongo que fué el instinto de superviviencia, más que la agilidad , la que esquivó, en parte, la pedazo de bofetada que me caería; y encima con uñas largas. El arañazo sería lo peor, según los que me rodean; es cierto, tiene mucho potencial contagioso, pero al menos a ella se le sabe, se le ve en la cara, en todo. Y además los apellidos.
Unos dias antes su padre, integrado, según los payos, me dijo que éramos racistas; bueno, puede que tuviese algo de razón (clasistas más bien), al fin alguien había largado un chiste de gitanos en un espacio muy abierto, y él lo había escuchado. No pasó nada, a mi me queda el camarón y conocerlos desde hace un puñado de años. Y el día de la bofetada , ante su congoja después (al fin su hija, y no era el 1º, entre droga de los setenta-ochenta y la de los yupis, se los robaba) dividí, sin querer, esa corta vida en tercios (treintaypocos): lo que le quedara de infancia, dónde todo se aprende( ferias, regateo etc) / pinchazos ,esnifes, prostitución/ enfermedad y callejeo/...y pensé que como mínimo ,mimarla; no hizo falta: se durmió, y luego me dijo: antes soñaba (deliraba), me das un tranxilium?. Y en esos momentos, encogida en la cama parecía "un cervatillo asustado", para darle un "toque intelectual-poético".
esta noche más, y ojalá pase Baltasar por la ventana, en vez de las gaviotas carroñeras.
En algunas cosas le das ocho mil rodeos a la gente que aveces me rodeó...
abrazos Yoly.
No me duele, de verdad. Y si te mueres esta noche, pues cantamos por camarón.

viernes, 2 de enero de 2009

contrastes



vigo y sus contrastes


Hace ya tiempo que pienso que la noche fin de año es la noche más triste. Por eso ya no me afecta.
Eso sí, a pesar de haber pasado la tarde trabajando, y tras un lavado de gato, al cenar con la familia notaba “la negra sombra”….pero al menos estábamos reunidos, y brindando con sidra.
La frase era: qué sea mejor, un poquito, que éste.
Han pasado muchas cosas, siguen pasando , hay una historia en caliente que sería un guión perfecto para una telenovela de la emigración. Y sin embargo nos abrazamos, brindamos…aunque luego sé que alguna tía lloró; y no pasa nada. Llorar es el mecanismo natural de la tristeza, del dolor.
Yo volví a casa paseando (no paseaba yo sola) y vi a las adolescentes tiritando de ´frío, con sandalias y vestido, a los tranquilos que sacaban al perro, el follón que ya se comenzaba a montar a las puertas del Hospital, a los grupos trajeados que daban risa etc (eran las 2 de la mañana).
Al llegar a casa me metí en la ducha, y de paso ya me di cuenta de que cierto marisco me produjo alergia: unos cuantos ronchones por el cuerpo. Ya pasará. Al fin, ya lo sabía, pero lo había comido por complacer a la cocinera.
Hoy leo en la prensa los flecos de la noche, en el sentido de broncas, urgencias y demás.
Y me alegro de haber disfrutado de la mañana de año nuevo , con un paseo a la hora del “ángelus” , y una especie de sesión vermú en una de las pocas cafeterías abiertas.
Qué sea un buen año.
Aunque tampoco le pido nada.
Feliz año nuevo, quiero decir.